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Comunidades de talento: Qué son, beneficios y cómo se generan

Las talent communities, o comunidades de talento, son una parte fundamental dentro del reclutamiento estratégico. Funcionan como una base de datos en la que se almacenan perfiles profesionales, que en algún momento podrán convertirse en potenciales candidatos a tener en cuenta en un proceso de reclutamiento.

¿Qué tipo de empresas necesitan una talent community? Son apropiadas para organizaciones en las que RRHH tiene visión a largo plazo, ya que busca un equilibrio entre sus necesidades de talento actuales y futuras. Son cada vez más utilizadas por empresas que contratan un número alto de trabajadores para puestos similares, aquellas que necesitan un conjunto de habilidades muy específicas o bien en las que requieren un flujo continuo de talento.

¿Cómo se genera una comunidad de talento?

La comunidad de talento se forma con los leads que se recogen desde diferentes fuentes. Pueden ser candidatos que visitan la página de ofertas de empleo de una empresa, los asistentes a un evento físico, las personas que interactúan en las redes sociales, etc. El elemento común es siempre el interés mostrado por la cultura corporativa o las actividades de la empresa.

La base de datos puede segmentarse siguiendo diferentes criterios. Por ejemplo, los potenciales candidatos se pueden agrupar por experiencia, formación, ubicación, disponibilidad, especialización, etc.

¿Cómo se mantiene el contacto con la comunidad?

La forma más común es a través de newsletters en las que se envían novedades o información sobre la empresa. También es posible entablar conversaciones personalizadas, por ejemplo, a través de LinkedIn. De esta forma, cuando el profesional esté dispuesto a dar el paso para iniciar un proceso de incorporación, la empresa estará en su top of mind a la hora de tomar una decisión.

Un aspecto importante es el de la frecuencia de las comunicaciones con la comunidad. Es necesario no abrumar a la audiencia con mensajes demasiado frecuentes, por lo que una buena periodicidad puede ser quincenal o mensual. También se puede variar el tipo de contenido enviado: videos, testimonios, artículos de interés, encuestas, etc. Cuanto mayor sea el engagement con la comunidad, más productiva será esta como fuente para futuras incorporaciones.

Aunque algunas empresas envían sus vacantes de empleo a las comunidades de talento, no hay que olvidar que se trata de candidatos pasivos. Es decir, no están buscando activamente un cambio laboral. Por eso, compartir información, por ejemplo, sobre la tecnología que utiliza la empresa o sus previsiones de ventas es otra forma de ayudar al desarrollo de los profesionales, además de cumplir con el objetivo estratégico de permanecer en el radar de un potencial futuro empleado.

Beneficios de una comunidad de talento

Mantener una comunidad de talento permite identificar posibles candidatos incluso antes de que se abra una nueva posición. Una vez que esta surge, el proceso es mucho más rápido que si hubiera que partir de cero.

  • Los costes relacionados con el proceso de contratación se estiman en unos 4.000 dólares y 24 días de dedicación. La comunidad de talento permite acortar esos costes: tal vez ni siquiera es necesario publicar la oferta y hacer una selección de perfiles, porque la empresa puede dirigirse directamente al pool de candidatos potenciales.

  • También se reducen notablemente los tiempos asociados al proceso, que como media pueden alargarse más de 30 días. En una comunidad de talento, las fases iniciales de selección y precalificación de candidatos ya están resueltas.

  • A menudo es complicado elegir entre varios candidatos con altas cualificaciones. Como solo es posible quedarse con uno, los descartados pueden pasar a la comunidad y permanecer de alguna manera en diálogo con la empresa, de manera que no se pierda el contacto ni la posibilidad de una futura incorporación.

  • La mayoría de los profesionales son candidatos pasivos. Es decir, aunque la empresa pudiera interesarse por ellos, no están buscando activamente empleo. La comunidad de talento permite establecer una relación con los candidatos pasivos, a través de una comunicación regular o recompensando su pertenencia con alguna aportación de valor.

Construir y mantener una talent community supone un esfuerzo a largo plazo. A cambio, garantizan que cuando un profesional esté listo para cambiar de empleo, pensará en primer lugar en tu empresa. Una vez completado el esfuerzo de crear la comunidad, los frutos vendrán a la hora de cubrir las necesidades de talento futuras.

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